Cuando más me he esmerado en la compra (por cierto cara) de focos ahorradores de energía eléctrica, seguir con las recomendaciones para bajar el consumo, es decir vigilar el comportamiento de los aparatos eléctricos, me llega un recibo de energía eléctrica por más de, agárrese, ¡$50.00!, cuando a mi vecina le salen, a lo mucho, $15.
Pero lo que me llama la atención es enterarme de que mi plan de ahorro basado en recomendaciones de la distribuidora transnacional no sirve de nada: el recibo trae un rotulito que dice que el costo de este mes es un promedio de los meses anteriores. ¡Ya me extrañaba no ver al señor que pasaba leyendo el contador! Esta es la segunda vez que me sale dicho rotulito.
Cuando se privatizó la distribución de la energía eléctrica, los hijos de la gran p… atria areneros, dijeron que tendríamos un servicio mejor y más barato, ¡otra mentira!
De entrada aparecieron costos que no pagábamos: atención al cliente, uso de red, poste del foco público, y de ribete, para asegurar la “sustentabilidad” del nuevo dueño de la distribución, el gobierno se inventó “revisar las tarifas de acuerdo al mercado”. ¡Malditos! ¡Cómo si El Salvador no tuviera cuatro generadoras de energía vía Río Lempa!, además de otras formas de producción.
No bastando con que los recibos fueron cargados más y más, se le ocurre al gobierno ¡PAGARLES SUBSIDIO! ¿CÓMO ES ESO? Dizque para no subir la tarifa, cuando ya estaba arriba.
Si el gobierno volviera a tomar las riendas de la distribución de la energía eléctrica, con esa idea de la “preferencia por los pobres”, nos haría un gran favor, o varios favores, entre ellos bajar la tarifa, la corrupción en la entrega del subsidio, y ¡hasta saldría ganando!, porque el objetivo de un gobierno planteado para los pobres no es la ganancia, tal como opera la transnacional, sino beneficiar a la gente, y en se sentido desaparecería la “ganancia lagarta” de esta transnacional.
Es indudable que el próximo gobierno de izquierda tiene un gran trabajo en enderezar todas las torceduras que dejan los areneros, y eso pasa por hacer una auditoría a esa transnacional, que de paso saca las ganancias que obtiene para otro país y no las deja para el tan necesitado circulante nacional.
¡Y la ridiculez de la rebaja por el subsidio! Vea bien su recibo, y lea donde dice que le rebajan por subsidio, son apenas un par de enanos centavos frente al gigantesco supuesto gasto por energía.
No se trata de mi persona, individual, que es lo que CAESS alega, que con casos particulares, no, se trata de un gran segmento de la población, que sobre sus espaldas carga con el gasto que hacen otros que viven en champas con todo el esplendor de la energía eléctrica, con aparatos de todo tipo, grandes ventiladores, talleres, pero que apenas pagan cinco o siete dólares, todo por que viven en una zona de aparentes pobres.
Igual sucede con la tarifa de ANDA. Alegan que necesitan subsidio cuando ¡SU TARIFA LLEGA BIEN ELEVADA! Y con medidores nuevos, que no todas las casas lo tienen, y que nadie llega a leer.
Bonita herencia que nos dejan los areneros. Ojalá que el nuevo gobierno tome esta queja en su ya larga lista de demandas.
Néstor Martínez
Periodista/Escritor
Pero lo que me llama la atención es enterarme de que mi plan de ahorro basado en recomendaciones de la distribuidora transnacional no sirve de nada: el recibo trae un rotulito que dice que el costo de este mes es un promedio de los meses anteriores. ¡Ya me extrañaba no ver al señor que pasaba leyendo el contador! Esta es la segunda vez que me sale dicho rotulito.
Cuando se privatizó la distribución de la energía eléctrica, los hijos de la gran p… atria areneros, dijeron que tendríamos un servicio mejor y más barato, ¡otra mentira!
De entrada aparecieron costos que no pagábamos: atención al cliente, uso de red, poste del foco público, y de ribete, para asegurar la “sustentabilidad” del nuevo dueño de la distribución, el gobierno se inventó “revisar las tarifas de acuerdo al mercado”. ¡Malditos! ¡Cómo si El Salvador no tuviera cuatro generadoras de energía vía Río Lempa!, además de otras formas de producción.
No bastando con que los recibos fueron cargados más y más, se le ocurre al gobierno ¡PAGARLES SUBSIDIO! ¿CÓMO ES ESO? Dizque para no subir la tarifa, cuando ya estaba arriba.
Si el gobierno volviera a tomar las riendas de la distribución de la energía eléctrica, con esa idea de la “preferencia por los pobres”, nos haría un gran favor, o varios favores, entre ellos bajar la tarifa, la corrupción en la entrega del subsidio, y ¡hasta saldría ganando!, porque el objetivo de un gobierno planteado para los pobres no es la ganancia, tal como opera la transnacional, sino beneficiar a la gente, y en se sentido desaparecería la “ganancia lagarta” de esta transnacional.
Es indudable que el próximo gobierno de izquierda tiene un gran trabajo en enderezar todas las torceduras que dejan los areneros, y eso pasa por hacer una auditoría a esa transnacional, que de paso saca las ganancias que obtiene para otro país y no las deja para el tan necesitado circulante nacional.
¡Y la ridiculez de la rebaja por el subsidio! Vea bien su recibo, y lea donde dice que le rebajan por subsidio, son apenas un par de enanos centavos frente al gigantesco supuesto gasto por energía.
No se trata de mi persona, individual, que es lo que CAESS alega, que con casos particulares, no, se trata de un gran segmento de la población, que sobre sus espaldas carga con el gasto que hacen otros que viven en champas con todo el esplendor de la energía eléctrica, con aparatos de todo tipo, grandes ventiladores, talleres, pero que apenas pagan cinco o siete dólares, todo por que viven en una zona de aparentes pobres.
Igual sucede con la tarifa de ANDA. Alegan que necesitan subsidio cuando ¡SU TARIFA LLEGA BIEN ELEVADA! Y con medidores nuevos, que no todas las casas lo tienen, y que nadie llega a leer.
Bonita herencia que nos dejan los areneros. Ojalá que el nuevo gobierno tome esta queja en su ya larga lista de demandas.
Néstor Martínez
Periodista/Escritor
1 comentario:
a la puta! esta gente bien sabido es que solo buscan antes que favorecer al pueblo, desangralo mas!
todos en todas partes estan, es decir los areneros, asi que ellos mismos se pagan y se cobran.
por ende todo lo nuestro les queda a ellos!
y hasta cuando los vamos a aguantar?
y hasta cuando vamos a tener a alguien que se proponga de verdad protegernos de estas ratas usureras?
le pido a mauricio funes que entre con tocho morocho al gober y que me limpie de toda esa basura aprovechada que se a estado nutriendo y engordando a costa de nuestras costillas!
fuera ya del gobierno ratas usureras!!
dejen de sangrar mas al pueblo!
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